Cabalgando bajo la línea del horizonte
Pasa por la ventana la luz
Que tengo la puerta con llave
El cerrojo está echado
Mientras mis ojos deslumbrados por el rayo
Pasean por la línea del horizonte vacilando
Con muletas los llevo aupados
Sedientos, deambulan entre las playas de guijarros
Corre una brisa de pensamientos
El cielo un mar innavegable
Lleno de olas moldeables
Un sepulcro resurge en los atardeceres
El sol desprende su aliento cadavérico
Ennudeciendo la sonrisa de los moribundos
Un mendigo mira con su ojo lunático recitando un poema de amor
Calcetines
Cuando estoy solo con mi ovillo
Me asomo a la terraza
En ella veo calcetines colgados
De las cuerdas salen pinzas que agarran
por el cuello a los descolgados
Un arco iris van formando
En hileras silenciosas,
Desfilando los recuerdos
En cofradías hermanadas
Advocaciones paganas de charlatanes
Aireándose pensamientos
recorren sus marañas
Cuando cambio de vista y me asomo por la ventana
Veo esos calcetines embutidos en sus dueños;
caminando con su gritos procesados
Esos calcetines de colores se vuelven opacos
Los maniquíes cortan el viento con el aliento de sus cloacas
Crujen malos tiempos para los calcetines.
El sol brillante me abraza con sus bucles dorados.
Exprimiéndome como un limón, las gotas sudorosas de mi cuerpo.
Se amontonan en los baches de mi piel
Los charcos,
en las noches de invierno, recubiertos de su piel cristalina
No deja salir esas gotas, para besar las estrellas.
Abrigando mis gotas con unos calcetines largos.
Riego el campo árido, los sonidos se van filtrando por las grietas del desierto
La luna de fuego a lo lejos, como una ascua ardientes entre las cenizas de la noche,
Arrodillada entre las aguas, meciéndose en la hamaca del firmamento,
Las farolas van iluminado el camino en el océano; sus crespones blancos,
Brillan los ojos de los enamorados.
A. Sacd@
Siempre se puede salir descalzo y romper la piel cristalina de esos charcos para dejar que esas gotas consigan besar las estrellas. Después se busca algún calcetín en la cuerda para abrigarse y todos contentos ;)
ResponderEliminarMe gusta andar descalza para sentir en mis pies el suelo que pisa...
ResponderEliminarVuelvo a reabrir mis blogs, aunque jamás me fui del todo, pero necesitaba descansar.
Un beso.
Prueba a saltar sobre un charco,desinhibete con ese olor a tierra,moja tus calcetines y los de quien te acompañe,riete y se feliz.bss
ResponderEliminar